Hoy desperté con el silbido del viento sur, que desplegaba toda su mágica sinfonía frente a la ventana. Luego un relámpago dio la señal para que un trombón desde el cielo invitara a que un coro de gotas me regalaran su canto en forma de lluvia.
Momento ideal si los hay, para disfrutar y meditar sobre los grandes desafíos y ansiedades que nos deja este ultimo tiempo pero,
les confieso; durante varios minutos halle mas interesante disfrutar del maravilloso espectáculo de colores y danza que me brindaba el cielo. Esas nubes parían el agua sobre el el follaje de las plantas y estas agradecían, con una elegante y rítmica reverencia a la naturaleza .
Que pensamiento puede superar tanta maravilla ?
Solo preferí mirar, disfrutar y aprender y créanme, fui feliz.
Emanuel F Guido